La caída de la bolsa a nivel internacional vaticina una de las peores crisis económicas de las últimas décadas, una nueva crisis en donde los que pierden siempre son los mismos, la clase obrera y el pueblo.
A nivel internacional la crisis comienza a tocar las tasas de ganancias de los grandes conglomerados, entendiendo esto como un leve estancamiento en las exorbitantes ganancias de las trasnacionales y grupos económicos, que no se piense que comienzan a perder, sólo dejan de ganar con la rapidez que generalmente lo hacen.
A nivel nacional, la crisis aún no ha afectado a los grupos económicos, ya que pese a la compleja situación mundial la economía chilena se ha mantenido por sobre el 4%. Quienes realmente han sido afectados son las grandes mayorías, ya que las alzas de los productos básicos ya llevan varios meses castigando los bolsillos populares, esto es, la crisis de distribución de este modelo neoliberal, llegó hace tiempo, y llegó para quedarse.
Es en este contexto en que se enmarcan las elecciones de alcaldes y concejales de finales de octubre, una elección que presenta variaciones de forma dentro de la clase política, pero no de fondo. Ya que el bloque dominante, es decir, los empresarios nacionales y transnacionales y sus representantes políticos, la Concertación y la Alianza por Chile, no han dejado de ganar, pese a la crisis, en las próximas elecciones la variación dentro de los conglomerados políticos será mínima.
La política del mal menor se ha entronizado en nuestro país, ya que quienes principalmente votan no son los que pierden en este tipo de crisis, así lo demuestran las estadísticas que hablan de más de tres millones de personas que no están inscritas en el añejo sistema electoral. Para muestra un botón, para las municipales del 2004 sólo un 8,9% de los jóvenes chilenos menores de 30 participaron, en 1988 esta estadística era de 48,55%. De este 8.9% de jóvenes menores de 30 años que están inscritos para votar este año, 7 de cada 10 jóvenes pobres se niega a pertenecer al “mercado de votantes”, es decir, que más del 70% de los jóvenes de los estratos económicos más bajos no está inscrito, esto según La Quinta Encuesta Nacional de Juventud.
Según esta realidad de representación, lo más probable es que la Concertación gobierne su quinto período, ya que el padrón electoral actual, lejos de representar al pueblo de Chile, sólo representa a los más acomodados de este país: la burguesía.
Lo fundamental de esta situación no es comenzar histéricamente a llamar a inscribirse, sino seguir construyendo alternativas reales para nuestro pueblo ya que durante los cuatro gobiernos de la Concertación lo único que nos ha quedado claro es que si queremos algo, debemos exigirlo para lograrlo, es por eso que debemos prepararnos para afrontar esta nueva elección que se enmarca dentro de una nueva crisis, con más movilización, con más lucha.
¡¡¡Arriba los que luchan!!!
Radio Popular Nueva Aurora, 97.7 FM
"Escúchate, escúchanos "
(ahora también online)
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